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What a year, right? En plena época de nuevas planificaciones, recaps y evaluaciones, nos preguntamos cuál es el balance de los espacios flexibles y el sector flex. Ya en enero de 2023, el año apuntaba maneras y, al mismo tiempo que se afianzaba el modelo de trabajo híbrido tras la pandemia y la vida con teletrabajo, el éxodo a las oficinas flexibles ya era más que notable.
Viviendo desde dentro el recorrido del coworking y su metamorfosis hacia convertirse en el espacio de trabajo preferido por clientes corporate, celebramos con todxs vosotrxs esta primera reunión del año para analizar exhaustivamente la evolución y tendencias más flexibles.
¡Comenzamos!
Aunque desde hace años las oficinas flexibles son tendencia entre el perfil corporate, 2023 ha sido sin duda the icing on the cake. En Lexington, cerramos el ejercicio con un crecimiento en metros cuadrados de oficinas flexibles del 18% y alcanzamos una tasa de renovación de contratos por parte de nuestros clientes, en su mayoría grandes corporaciones, que supera el 84%. Hemos aterrizado de nuevo en Barcelona con la apertura de Lexington L’illa, mientras que en la capital hemos ampliado la planta 5 de nuestro espacio flex en Castellana 79. Nada mal, ¿verdad?
El modelo de coworking para empresas sigue ofreciendo incontables ventajas para compañías y empleados. Empezamos en una flexibilidad que se extiende por condiciones contractuales, horario, diseño de espacios y crecimiento, hasta un ahorro también muuuuuuy flexible, pues cubre una infinidad de partidas.
El hecho de ofrecer entornos de trabajo totalmente pensados para encontrar el equilibrio perfecto entre privacidad y colaboración, otorga a lxs managers una propuesta que mejora el bienestar de sus equipos para lograr la máxima captación y retención de talento. La diversidad de formatos, con todo tipo de amenities y opciones de personalización, hacen que los espacios flexibles estén ayudando a las empresas usuarias en su lucha para dar sentido a la oficina y hacer volver a sus equipos de trabajo.
La naturaleza del coworking siempre ha sido algo nómada: la flexibilidad propiciaba las mejores condiciones para un periodo de adaptación concreto, el aterrizaje en un mercado o país nuevo, o simplemente cubrir una temporada en la que la oficina convencional no estaba disponible, pero con fecha de caducidad en muchos casos. Aunque no tan arraigado como en 1981 (cuando el concepto de espacios de trabajo compartidos llegó a España importado de los Estados Unidos), el sentimiento de propiedad siempre ha estado (y sigue) muy presente en nuestro país.
Sin embargo, 2023 también ha marcado el inicio del fin en este aspecto. El pasado año nos deja con una cifra de 600 empresas que confían en Lexington, con clientes corporate que siguen prorrogando sus contratos durante 6, 12 y 24 meses más, sin ninguna intención de abandonar los espacios de trabajo flexibles de Lexington. El ahorro en costes, las oportunidades que un flex les brinda en cuanto a atracción del talento o sinergias con otras compañías y el refuerzo de la imagen de marca en direcciones estratégicas de la ciudad, entre otras, son los principales motivos detrás de la toma de estas decisiones. Las puertas que se abren ante empresas de todos los tamaños gracias a ubicar su sede en pleno centro financiero de Madrid o Barcelona no es un punto que tomen a la ligera, y cualquier cambio a menos ni siquiera se plantea.
Otro de los grandes factores que caracterizan este crecimiento del sector hasta alcanzar la altura de las demandas más corporativas es la personalización del espacio, la customización de los entornos para el trabajo y la variedad de atmósferas que crea, siendo los equipos siempre capaces de encontrar lo que necesitan en el momento exacto.
¡La oficina flexible ya no deja indiferente a nadie! De puestos compartidos a espacios 100% customizados según la imagen de marca de cada compañía, con recursos comunes y posibilidad de construir esos mismos (como salas de reuniones, phone booths o, incluso, recepción) dentro de las suites corporativas o plantas enteramente dedicadas.
La experiencia de la oficina ha cambiado por completo, y los objetivos de las estrategias de workplace también se han transformado. El espacio para el trabajo ya no se acaba al girar la silla del escritorio, y contar con módulos que propicien el trabajo colaborativo, las relaciones interpersonales dentro del círculo laboral y la lluvia de ideas es ya imprescindible. Las personas pasan a ser los protagonistas de estos planteamientos, su comodidad, productividad y sentimiento de pertenencia.
La tendencia en oficinas flexibles en 2024 está clara, y hasta en las cumbres del sector flex, como lo fue el Coworking Summit de Proworkspaces celebrado a principios del mes de octubre, el punto de mira está en oficinas más flexibles, más colaborativas y más sostenibles.
El coworking como modelo de workspace para autónomos y pymes es estable, y sus adeptos ya lo entienden como la solución definitiva. En cambio, es la gran corporación, los grandes equipos y las demandas más tecnológicas y sostenibles las que elevarán este sector de ahora en adelante. Estos avances en tecnología, políticas que respetan el medioambiente y diseño serán los que expriman todo el potencial de los espacios de trabajo flexibles.
Según palabras del CEO de Lexington, David Vega, «Las oficinas flexibles reforzarán todo aquello relativo a la seguridad y acceso al espacio y recursos. Cada vez integraremos más prestaciones que permitan interactuar al usuario con el espacio y sus funcionalidades a través de unos pocos clics, a través de huella o con el smartphone como aliado. Sin olvidar el peso de las comunidades online para la interacción de los miembros o de los sistemas de telepresencia para que el mundo presencial y remoto puedan convivir sin ningún tipo de problema. El diseño, por su parte, tiende a la versatilidad, a formatos de diferentes usos y a rincones previstos para muchos tipos de necesidades, actividades y generaciones de trabajadores. En este sentido, los centennials o gen Z vienen pisando muy fuerte y cuentan con un alto nivel de exigencia en relación a la cultura laboral de la que quieren formar parte.
Por último, la sostenibilidad es sin duda una tendencia clave en el ámbito de los espacios flexibles. Consideraciones cada vez más relevantes que los operadores debemos seguir abordando y ampliando para atraer a empresas comprometidas con la responsabilidad ambiental.»
Según datos de CBRE, el ’stock flex’ crece y los niveles de ocupación se incrementan de manera firme. En este contexto, el informe promovido por Savills refleja que Madrid sigue destacando como la cuarta ciudad con mayor concentración de oficinas flexibles en Europa y sus previsiones indican una demanda estable y una mayor ocupación en este 2024.
Las rutinas de trabajo también se reafirmarán: los equipos aún a caballo entre presencialidad y teletrabajo terminarán por establecer el modelo híbrido de manera más sólida, la flexibilidad horaria y espacial seguirá desarrollándose y el trabajo en los terceros espacios ganará en popularidad entre los equipos en remoto. Estos datos refuerzan nuestro compromiso de seguir ofreciendo soluciones flexibles y eficaces a las empresas y sus equipos, así como a contribuir al continuo desarrollo de este sector que reduce la incertidumbre de las inversiones y que aumenta la captación y retención de talento.
La adaptabilidad y la innovación seguirán siendo nuestros pilares, mientras avanzamos hacia un futuro lleno de oportunidades y posibilidades sin límites. 💫
El balance, como no podía ser de otra manera, es muy positivo, y es que los espacios de trabajo flexibles y el coworking han encontrado en las grandes corporaciones la horma de su zapato, y una de las mayores oportunidades de progreso de los últimos años. ¡Y proyectamos un futuro aún mejor!
«Trabaja en tus fortalezas, no solo en tus debilidades. ¿Cuántos de tus propósitos de año nuevo han sido sobre arreglar algún defecto?»
Jonathan Haidt
El autor
Su IPhone es una extensión más de su cuerpo, ¡y es que nuestra Social Media Manager (Taylor’s Version) es experta en reels, trends y en encontrar siempre los giros más rebel! Cuenta con más de 6 años de experiencia como creadora de contenido, una pasión desbordante por la lectura y la mezcla perfecta entre milennial y generación Z.
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