Índice de contenidos
Índice de contenidos
El neuromarketing nace de la mezcla de la neurociencia (ciencia que estudia el sistema nervioso) y el marketing (práctica que busca el aumento de la visibilidad de una empresa y sus oportunidades comerciales). Pero, ¿sabéis realmente qué es el neuromarketing y qué pretende conseguir? Este concepto busca conocer cómo se comporta el cerebro humano ante un proceso de compra, cómo reacciona ante una campaña publicitaria y cómo decide finalmente comprar un producto frente a toda la oferta disponible.
Para que todxs nos entendamos, ¿no os habéis dado cuenta de que siempre que veis un cartel rojo en una tienda corréis hacia él a por el mejor chollo?, ¿o quizás habéis reparado en que, cada vez que entráis en el super o en una tienda de decoración (sea sueca o no), las horas parece que pasan más rápido?, ¿y no os parece que la panadería siempre huele a pan recién hecho, aunque no estén horneando durante todo el día?
Cada vez son más las empresas que apuestan por aplicar técnicas de venta relacionadas con el neuromarketing con el fin de intentar descifrar las conductas de los posibles consumidores y aumentar sus ventas. Y es que los consumidores toman sus decisiones basándose en factores emocionales subconscientes más que en razonamientos lógicos.
El neuromarketing tiene un objetivo principal, y ese es conocer más y mejor a nuestro buyer persona, es decir, a nuestro público objetivo.
Enfocándose en las emociones y las respuestas más subconscientes, el neuromarketing nos enseñará cómo afectan según qué estímulos a los consumidores en las diferentes fases del proceso de compra. Huyendo de la subjetividad más personal y siempre estudiando factores cuantitativos.
De esta manera y atendiendo a cómo y qué le gusta a nuestro cliente, podremos mejorar a muchos niveles la experiencia global del usuario, e incluso nuestros productos y servicios en consecuencia.
Basándose, como decíamos, en los estímulos que mueven el cerebro humano, el neuromarketing enfoca su estudio en tres aspectos clave:
El neuromarketing explica por qué la marca debe ser capaz de generar un estímulo que capte el interés del público. Y es que, aunque es una tarea complicada, es imprescindible llamar la atención para que el consumidor pueda considerar, en pasos avanzados, la compra. Si tenemos un producto excelente pero no logramos captar la atención de nuestro público objetivo, estamos destinados al fracaso.
Tras el toque de atención, conseguir emocionar al consumidor es el fundamental. Es innegable que un consumidor atento y emocionado tendrá mayor predisposición a comprar un producto o contratar un servicio que uno al que nuestra compañía le deja completamente indiferente.
Si se ha prestado la suficiente atención y la emoción ha sido efectiva, el posible comprador recordará el producto y considerará firmemente su compra en el presente o en el futuro.
Quizás te interese
Quizás te interese
En busca de inspiración: 10 libros de liderazgo empresarial que añadir a tu biblioteca
Anna Jorge
Quizás te interese
Quizás te interese
6 estrategias de fidelización de clientes para que tu empresa triunfe en el mercado
María Luisa Navarrete
Quizás te interese
Quizás te interese
5 rutinas saludables para trabajar desde casa
María Luisa Navarrete
Quizás te interese
Quizás te interese
Reskilling y Upskilling: cómo reinventar y formar a tus equipos
María Luisa Navarrete
El neuromarketing tiene un futuro muy prometedor, y es que ¿qué empresa no querría impactar a su público?, ¿o qué consumidor no querría encontrar exactamente lo que busca mientras se adentra en una experiencia inmersiva diseñada a su gusto?
Para poder exprimir al máximo el potencial de las técnicas de neuromarketing, la tecnología adoptará un papel revolucionario, desarrollando dispositivos capaces de establecer las métricas sin ser demasiado intrusivos en el usuario. De hecho, llegará un momento en el que ni nos daremos cuenta de que los estamos usando.
La realidad virtual y la inteligencia artificial (AI), tan en boca de todos actualmente, también tomarán protagonismo. Ambas tecnologías podrán crear entornos ficticios y razonamientos a tiempo real en los que se analicen los comportamientos de los consumidores en millones de situaciones distintas al mismo tiempo. Parece una locura, sí, pero en el multiverso todo el posible.
El futuro del neuromarketing irá de la mano con la nanotecnología, desarrollando lo que conoceremos como nanomarketing.
La experiencia de compra del usuario, tanto antes como después de tomar la decisión, es igual de importante que el producto o servicio en sí. Es por eso que los sentimientos y emociones de nuestro público objetivo se convierten en parte central de los planes de acción y estrategias comerciales de las compañías más ambiciosas.
En el marketing sensorial resultado de este enfoque participan varias técnicas de neuromarketing, que podemos diferenciar en:
Tenemos casi todo el trabajo hecho si conseguimos entrar por los ojos. Todo lo que nos llega a través de la vista influye en nuestras decisiones y percepción. El neuromarketing explica cómo los colores, las palabras o la situación de los productos en los establecimientos influyen claramente en la decisión final del consumidor. Así, un producto ofertado a 19,99€ tendrá más ventas que uno que cuesta 20€ y claramente el céntimo de diferencia no es el que hace que el consumidor se decante por el primero producto, sino la asociación que hace el cerebro de estar comprado algo más barato.
A través del oído y de todo lo que escuchamos, el neuromarketing explica cómo un consumidor es capaz de generar una emoción concreta: alegría, relajación, estrés, rechazo… y cómo esta emoción va a influir en su comportamiento. Y es que la música tiene un gran poder en la estimulación del cerebro y, por consiguiente, en la toma de decisiones y comportamientos. En este aspecto es tan importante lo que escuchamos como lo que no. El neuromarketing explica el gran efecto que causa en la atención de las personas la ausencia de sonido, el silencio. De hecho, este recurso se ha convertido también en elemento importante en las campañas publicitarias para captar la atención eficazmente.
No solo los ojos y los oídos captan mensajes. A través del olfato, el gusto y el tacto también recibimos continuamente información útil que nuestro cerebro examina y descifra. Esta información es incluso más eficaz que la que proviene del sentido de la vista y del oído, sobre todo, en experiencias físicas.
Según explican los estudios del neuromarketing, es una información mucho más emocional y personal y, por tanto, más difícil de influenciar. Es complicado, por ejemplo, conseguir una fragancia para una tienda de ropa que guste a todo el mundo. Sin embargo, los consumidores que logren emocionarse ante ese olor, serán mucho más proclives a volver a visitarla, no solo motivados por consumir de nuevo su producto o servicio, sino por la experiencia vivida.
Y ahora que ya sabéis qué es el neuromarketing, seguro que sois capaces de descifrar alguna de las técnicas en las que alguna vez habéis caído.
«Soy un cerebro, Watson. El resto de mí es solo un apéndice.»
Arthur Conan Doyle
El autor
Nuestra CMO y experta en marketing corporativo tiene más de 12 años de experiencia encontrando ese algo que hace única a cada marca, proyectando siempre la energía más Lexington. Soraya es la encargada de potenciar nuestra personalidad rebel para que nuestros espacios de trabajo aparezcan en portada. Estratégica, de lo más organizada ¡y la manager con más ritmo de verbena!
Artículos relacionados
Ponte al día de la actualidad flex
Suscríbete a nuestra newsletter para que no te pierdas nada. Contenido trend que te interesará.
Contacta con nosotros
Solicitar información
Solicitar información free pass
Solicitar presupuesto
Visita nuestros espacios
Trabaja con nosotros
Contacta con nosotros
Trabaja en un workspace flexible.
Optimiza costes con respecto a una oficina convencional
¿Sabes qué gastos incluyen nuestras oficinas flexibles?
0 personas Oficina para
Selecciona
5 personas
10 personas
15 personas
25 personas
Escoge un número de personas y te mostraremos los gastos que están incluidos en el alquiler de nuestras oficinas flexibles.
Oficina convencional
Gastos operativos y de suministros:
€/mes
+ gastos de implantación
Oficina flexible
Gastos operativos y de suministros:
0 €/mes
Sin gastos de implantación
Incluido en la factura mensual
517,01 €/persona
0€
2.264,24 €/persona
0€
523,69 €/persona
0€
Fianza aval
6 meses
Depósito
2 meses
Desde
12 meses
Desde
1 mes
2-6 meses
2 meses
Solicita presupuesto